Espérame...

Espérame cuando ya la primavera

se haya ido.

Espérame cuando el invierno se demore

y parezca no terminar.

Espérame cuando los que contigo

esperaban mi vuelta,

se hayan cansado de esperar.

Camino a Larrasoaña

Viniendo de algún lugar y teniendo la fuerte impresión de que no avanzamos, nos adentramos en bosques umbrosos. El silencio es quebrado de tanto en tanto por el farfullar de las ramas de los árboles. Cada una luchando con sus fantasmas internos. Ya nada nos detiene, ni el cansancio que anida en cada una. Y la búsqueda incesante de nuestras metas mantiene firme nuestro paso. Somos llevadas hacia donde los mapas indican y nuestro corazón nos lleva. Ya no hay como volver atrás, solo nos resta continuar...

El verano tardío

De esta forma también podemos llamar a los últimos días del estío.

La luz nos llega oblicua, las mañanas se anuncian con cerrazones y el sol demora en mostrarse aunque en las tardes algunas veces el calor continúa inclemente. La humedad se hace presente y las noches se han vuelto frescas. El clima paso a paso se vuelve más agradable. Los colores de los campos se tornan ocres, amarillos, amarronados. Una paleta como solo la naturaleza sabe mostrar.

Para los chinos es la 5ª estación. También es transición.

De nuevo nos ponen en contacto con nuestro centro. Volvermos sin casi darnos cuenta a la Unión y Estabilidad.

Al final de cada estación, recogemos lo que nos ha enseñado ese período y lo que asimilamos para ir creando Madurez, que configura nuestro Yo  interior. De a poco y porque el cuerpo así lo pide, vamos cambiando nuestra alimentación. Frutas y legumbres de la nueva estación que se anuncia. Sin olvidar frutos secos y cereales.

Estaremos proclives a la instrospección, a bajar el ritmo, a dormir más y como marco una cierta melancolía en nuestro humor. Esto no debe verse como un "bajón inexplicable". Es nuestro cuerpo-mente entrando en acuerdo con la nueva estación.

Paseemos por el campo retomemos el contacto con la Madre Naturaleza a quien le debemos en parte la vuelta a la estabilidad y equilibrio, perdidos en los locos días del verano.

Para esa posible melancolía si te molesta, un floral:

Wild  Rose

Un abrazo

Graciela

La disciplina para los más pequeños

El castigo a los niños debe ser:

INAMOVIBLE

ESTRICTO    y

NO NEGOCIABLE

Y si tu, como padre o tutor, tienes dificultad para cumplir estas reglas debes saber:

1º- el que necesita de ayuda eres tu, y no el pequeño.

2º- Y que los niños sin límites, son infelices. Cuando los pequeños se miden con un adulto y recibe un NO, está probado, que aprenden varias cosas: respeto, continuar en la persecución de su metas y paz interior al saber que cumples con tu palabra.

Cuando todo se le facilita, lo conducimos a la práctica del egoísmo y del hastío.

El floral que aquí te indico es para ti y apropiado para aprender a decir que NO. 

Centaury

Un abrazo

Graciela

Cuida tus pensamientos y palabras

Palabras y pensamientos tienen poder. ¿Cuántas veces ante la posibilidad de alguna dificultad proyectas lo peor? Aún no sabes a ciencia cierta si el “veredicto” estará a tu favor, o tu garra para enfrentar la adversidad está dispuesta a darte un nuevo triunfo y ya estás augurando lo peor. No me digas que el miedo te tiene preso. Es una disculpa para dejarte llevar por el ego.

Sería mejor que pusieras en práctica el enfocarte en una vía positiva. Las oraciones que conozcas, o repetir Mantras que son tan efectivos, limpiar tu mente, obligarla a apartarse del lado oscuro traído por la duda y el temor, y envolverte en mucha luz...

No quiero decir que con esta actitud debas ignorar esta prueba que te toca vivenciar. No quiero decir que no sientas el dolor. Pero debes hacer el mejor esfuerzo para inyectar pensamientos y palabras positivas en esa situación. La manera como piensas acerca de las cosas y la manera en que hablas de ellas, les permite manifestarse.

En el nivel espiritual, la energía viene a este mundo sin forma.

Piensa en ella como el barro crudo antes de que el escultor le haya puesto las manos encima.

Tus palabras y pensamientos son las manos de ese escultor, dando aspecto, forma y dimensión a tu realidad. Tu completas la manifestación.

Tu boca forma la energía de una u otra manera. Cuando eres reflexivamente pesimista, corres el riesgo de crear manifestaciones pesadas, contrarias a tu verdadero deseo de ganarle a esa circunstancia. Pero nada es incambiable. Vigílate. Siempre estás a tiempo de darle un giro a tu actitud mental. Volver atrás en lo dicho. Corregir tu palabra, bendecir tu vocabulario con expresiones jubilosas.

Cuando tengas un sueño que te haya marcado deberías decírselo sólo a alguien que sabes que te ama de verdad. Como la energía, un sueño es Luz no manifestada todavía. Quizás desde algún punto de sabiduría, de tu mente te están conduciendo a un Camino de Triunfo.

También recuerda aquella 4 leyes seculares:

Para alcanzar una victoria debes:

1º- SABER

2º- QUERER

3º- OSAR

4º- y sobre todo, CALLAR.

Apártate en lo posible de gentes que no hace otra cosa que lanzar "pálidas": dudas e incertidumbres.

Cuando entendemos como la energía desciende, algunas veces positiva y otras como desafío, así también la forma en que nosotros y los que nos rodean hablan y piensan de dicha circunstancia, empieza a dar forma a la situación.

Por lo tanto sé consciente del peligro del habla y de los pensamientos negativos, ya que se relacionan contigo y con las personas que dejas entrar en tu vida.

A partir de hoy, entiende el poder infinito de tus expresiones y pensamientos y la importancia que juegan cuando manifiestan la realidad que tu le has impregnado. Cuanto más consciente te vuelves mejor será el resultado para ti y para los que amas. Si estás luchando para Crecer, volverte más Sabio para tu provecho y el de cada día, rodéate de aquellos que saben inyectar optimismo y de esta forma fortalecerás tu visión de la vida.

Cree, que la verdadera realidad es aquella que se aleja de viejas normas y sigue el Camino que tu corazón te dicta. Éste, nunca se equivoca.

Aquí te dejo un floral para limpiar tu mente:

Crab  Apple

Un abrazo

Graciela

La mejor versión de ti mismo

Seamos sinceros con nosotros mismos, admitamos que no estamos ni cerca de ser perfectos. ¿estás de acuerdo conmigo? Entonces sigue leyendo...

Ser perfecto no es la razón por la que estamos aquí, y sí, para trabajar y de esa forma convertirnos en la mejor versión posible.

Las elecciones que debemos hacer en cada movimiento diario son las que nos llevarán al final en la dirección de ser esa persona. Y si así reconociéramos entonces, mantenernos en ese camino.

Somos como un barco y de tanto en tanto enfrentaremos altas olas anunciadoras de tormentas. Habrá otras veces que nuestro movimiento será de remanso por aguas tranquilas. Pero mientras sigas de timonero sabrás que estás yendo hacia algún lugar.

Mientras recorres ese trayecto, que algunas veces has elegido consciente y otras casi sin darte cuenta, estás progresando. Aunque te cueste, aunque tengas tus horas de sufrimiento y sientas como si el cielo se hubiera vuelto sordo a tus ruegos.

Pero mantente confiante. Si eres constante tendrás oportunidades mil de crecer. No crecemos cuando somos felices por largas temporadas, lo ¿sabías? Crecemos cuando vivimos tiempos probatorios, que nos hacen parar y reflexionar. Y aunque la lucha sea cruenta debemos querernos más en esos momentos, aumentando nuestra autoestima, descubriendo la infinita fuente interior que poseemos para sobrevivir.

Recuerda: “lo que no mata, fortifica”

Comprométete con tus metas. Y si  te mantienes firme, un día me llamarás para decir, que sobre todas tus adversidades llegaste a vencer. El éxito coronó tu coraje.

Nunca pienses en el medio de los momentos adversos, que no alcanzarás lo propuesto, cuando por momentos el cansancio o el temor al fracaso te inunden, levanta una oración, nacida con palabras del corazón. Créeme, hay suficientes oportunidades para los desafíos de cada uno. No existen las “vacaciones” del Universo. Desconfía de tu ego. Quizás alguna vez, él quiera hacerte creer que ya has llegado a tu meta, o que nunca la alcanzarás. Es una forma de tentarte a la fuga, de que bajes los brazos y abandones ese escarpado camino que tanta falta te hace para continuar creciendo. Es la voz de tu Oponente, que susurra tentadora: “¿para qué trabajar tan duro? Quizás nunca lo consigas”…No olvides que no hay peor enemigo que uno mismo.

Algunas batallas pueden perderse, simplemente para saber más tarde que nuestra elección no era la más acertada. Mientras tanto...

aquí te dejo algunos florales para que puedas enfrentar los momentos de indecisiones:

Wild  Oat + Mountain  Pride

Un abrazo 

Graciela

Una vida plena

La vida es un continuo fluir de cosas, momentos, relaciones. Todo va y viene, como una constante oportunidad de cambiar o mejorar las situaciones.

Si pretendes llegar a tener una vida más próspera que la que has construido hasta ahora, le puedes dar a esta palabra el significado que desees. Será necesario entonces, crear nuevos espacios en tu corazón y mente. De esta manera estarás limpiando, sanando y retirando viejos padrones, para dar paso y espacio para recibir otros nuevos. Una actitud más amorosa y lúcida hacia ti mismo, puede ayudarte a identificar lo que ya no te conviene retener y así dejarlo marchar.

Si la felicidad tuviera una sola exigencia sería algo así: “Haz en ti todo el vacío que puedas, vacía tu alforja interior de toda creencia impura o negativa y que hasta ahora hayas considerado como imprescindible. Yo -la felicidad- necesito todo tu espacio interior para manifestarme libremente y que tú me puedas sentir sin más interpretaciones o convencimientos inútiles”

¿Quién se atreve a salir de sus ataduras y a sanar su vida sin sentirse culpable o dominado por la duda? Aferrado a viejos esquemas venido de tu infancia, de la casa paterna, y teniendo ahora, como única aprobación tu consciencia en camino a reconstruirse. Se necesita mucho coraje para zambullirse en tan drástico cambio. Y reconocer que a partir de esos nuevos tiempos sigues un nuevo camino solo indicado por tu corazón.

De esta forma estarás ordenando a tu interior erradicar todo bloqueo y abrir las compuertas que te llevarán paso a paso, hacia lo nuevo, hacia un concepto de felicidad nunca antes experimentado. Dejarás de ser víctima, para tornarte único e irrepetible, que ese es nuestro Divino Destino.

Esta debe ser la nueva creencia, en la nueva persona que paso a paso te irás transformando. Que confía en sí mismo y en la Vida. Que se ama y se lo confiesa. Que se sabe auto suficiente para respetarse y darse el respaldo necesario. Combatiendo tus miedos persistiendo en la búsqueda de una nueva meta que nadie te lo podrá indicar. Tu solito/a deberás descubrirla y trillarla.

¿Cuántos de nosotros no estamos a gusto en nuestro lugar de trabajo? Pero, ¡horror de los horrores! No nos atrevemos a buscar algo que nos convenga más y nos haga sentir la felicidad del comienzo de cada jornada. Acabar con ese sentimiento que me estruja el estómago, que me asfixia, por miedo, por falsa comodidad, por falta de confianza en mi capacidad o, por mantener la idea de que es la vida quien debe encargarse de traer un cambio.

Responsabilizarnos de nosotros mismos es el único camino conocido para sentirse partícipe de una verdadera vida sin decepcionarse jamás. Sin importar lo que los otros quieran para nosotros. Elige entonces hoy, deshacerte de comportamientos dependientes. Disponte a transitar por un camino nuevo, arquitectado por ti y para ti. No obedezcas nunca a la posesividad y el apego y sí a la generosidad y a la entrega del amor de ti hacia los otros que te merezcan.

Estos serían los primeros pasos para la sanación de tu mente. Son pasos eficaces y sencillos como los verás en la práctica.

Guarda este mantra y repítelo de vez en cuando:

“Soy uno/a y la misma cosa con el próspero poder del Universo”
Y también te dejo un floral para aumentar tu brillo:
GORSE

Un abrazo

Graciela

GANESH - removedor de obstáculos

OM  SHRI  GANESHAYA  NAMAH

Mi Mantra predilecto, por haber probado su eficacia en momentos de dificultad.

Si tu también necesitas de un instrumento poderoso para barrer obstáculos pruébalo.

Un abrazo

Graciela

No te rindas

Dios quiera que no. O la suerte si crees más en ella, pero si llego a ti y en este momento no es uno de tus mejores días, no te rindas. Como tantas veces he dicho, debemos aceptar nuestra sombra y, aunque no entendamos el porqué del conflicto, abrázalo. Lo peor que puedes hacer es resistir. Quizás, y aunque lo dudes o que te parezca una ilusión para darte apoyo en un mal momento, las dificultades llegan para probarnos que somos capaces de enfrentarlas y ganar la contienda.

La vida y todas las pruebas que nos asolan son los diversos obstáculos que en la suma de los días nosotros mismos hemos construído. Persigue, aún en este momento tus sueños. No desistas. Aunque el miedo te muerda, aunque sientas que el sol ya no te calienta como días pasados, aún hay vida en tu alma, aún estás llamado a reconstruir tu destino. Recuerda que es tuyo el libre albedrío. No te entregues a la inercia, al sentimiento victimario. Acepta el reto.

Cada día es un nuevo comienzo, otra etapa. Levanta una oración con tus propias palabras y pide, que lo que ha llegado sepas aceptarlo aunque no lo entiendas. No te quejes del momento, algo secreto se ha hecho presente para vivir esta experiencia. Permite que las horas formando los días te muestren al fin, cual es la lección a aprender de esta dificultad. Busca los recursos que todos llevamos dentro y que en el momento propicio te darás cuenta del tesoro silencioso  que guardabas y desconocías.

No dudes de tu triunfo y que es enorme e infinito el caudal de superación que posees y tu sentido de sobrevivencia es aún mayor.

Lucha con tu sombra y aunque no lo desees, abandona el silencio, la soledad y entra en el juego de los que te rodean. Escucha otras historias y te darás cuenta, que la tuya deja de ser la peor. Respira profundo y siente como la vida palpita en tu interior. Esto que vives es un instante y hay gente deseando verte mejor. Porque aunque te cueste creerlo, todos somos uno y nos necesitamos mutuamente. Aunque no conozcas al que a tu lado pasa, él como tu, forman parte de una energía superior, en la cual todos estamos involucrados.

Recuerda también que la diferencia entre el triunfo y el fracaso es la manera como enfrentamos cada día.
Reavalúa tu autoestima, tu coraje, la ausencia de tus temores y verás que tienes armas de sobra, para ganarle a esta tormenta. Tu forma de enfrentar el momento te permitirá utilizar más eficazmente tus habilidades y también te ayudará a evitar aquello sobre lo cual no tienes ningún control y que te afecta negativamente.

Formas parte de un universo mayor y tienes una tarea, más allá de la que a diario te avocas. Has venido a crecer, y aceptar, aunque no entiendas muchas veces lo que de pronto te asombra. Cada nuevo día es otro comienzo, cualquiera sea la hora y cada momento es el mejor. Porque estás vivo y porque puedes hacerlo.
Y aquí te dejo como de costumbre unos florales que te pueden ayudar si es que este, es el momento que vives:
Mountain Pride + Gorse + Gentian
Un abrazo.
Graciela

Isidra (cuentito)

Una noche de insomnio interminable, me trajo de vuelta un ser de mi infancia, el cual se había evaporado con el devenir fortuito de los años. No había habido antes nada que pulsara mi mente para rescartarla de aquel pasado lejano, del tiempo en que mi tiempo no era mío, sino tan sólo el de mis mayores...

Esta figura extravagante, digna de un protagonismo vanguardista, era una costurera con aires de modista, que vivía a los lados de la vía del tren. Que tenía un marido enamorado, maquinista de AFE, que hasta con su bestial instrumento de trabajo procuraba demostrarle su inagotable pasión.

Así era que cuando pasaba por la casa hacía resonar su estridente silbato y lanzaba nubes de vapor de gris metálico que quizás él, desde su alma enamorada las veía albas, como jirones de algodón. Entre el chirriante y destemplado sonido y la sacudida de los rieles que aullaban bajo las ruedas, la casa entera se estremecía y nosotras en el medio de una prueba, éramos presas de una terrorífica visión: dominadas por la infernal barahúnda, teníamos la nítida impresión que la máquina humeante arremetía contra nosotras y presas de un trágico destino éramos aniquiladas posando como estatuas, frente al inmenso espejo de luna, en medio de sedas, organzas y enaguas de festón.

Isidra, -pues sí, se llamaba Isidra Zuitas- interrumpía su elegante tarea, cerraba los ojos, respiraba profundo mientras la parafernalia exterior arreciaba. Se levantaba sin perder su donaire y cerraba el balcón. Desde el cual, minutos antes, nos deleitaba la vista del pequeño jardín pletórico de No me olvides  y trinos de jilgueros.

Toda vez que a su taller me llegaba, tenía ella la delicadeza de poner en mi regazo una caja de música color lacre, y su sonrisa era el permiso para abrirla. Estaba repleta de chucherías que a mis ojos eran deslumbrantes y me las iba poniendo en el cuello y en los brazos hasta parecerme a un maniquí enano, y como marco a ese momento un minué de Paderewski que se oía una vez el estuche abierto.

Luego, cuando partíamos, volvía la caja a su lugar, una mesa ratona que ocupaba también un gato atigrado que sobre un almohadón bordado con mostacillas dormitaba eternamente.

Pues bien, tenía Isidra la particularidad de realizar los modelos por duplicado. Uno para la clienta, y otro que se lo quedaba ella para uso y deleite propio. Esto era hecho sin malicia de ninguna especie. Y sus asiduas usuarias en un acuerdo tácito quedaban en silencio sin expresar su descontento. Así era que mis tías, de vez en cuando la veían pasearse vistiendo uno de aquellos trajes que con tanto esmero se habían devanado los sesos para idealizar.
Completaba Isidra sus atavíos con una infinita variedad de brazaletes de marfil y collares de muchas vueltas de corales de río o madreperlas con tintineantes cascabeles. Enormes aros de plata colgaban de sus orejas con artísticos abalorios que al entrechocarse repiqueteaban con un eco de campanillas.
Yo acostumbrada a las sempiternas perlas de mi madre, sus adornos me parecían fascinantes y de un gusto más allás de lo imaginable.

Era única e impagable la figura de la modista-plagista paseándose por nuestras calles. Los vestidos ideados para fiestas de los salones de entonces, ella los usaba para ir a los puestos de venta de pescados en el mercado del puerto. La veíamos cubierta de muselinas ondeantes y calzando zapatos forrados de moiré a las diez de la mañana entrando en algún almacén de esquina para comprar su pan marsellés. Cuando en las tardes, de la mano de una mucama iba yo a la confitería del centro por las masas para el té, allá estaba ella, eligiendo milhojas o besitos de coco vestida como para una soirée.  No podía negar el regocijo que me causaba verla. Se me acercaba enmaracada por sus sonantes oropeles, me pasaba la mano por el cabello, me besaba en la mejilla y me dejaba bañada por un halo de Lavanda de Mimosas, que era sus sello inconfundible.
Mi acompañante en cuestión tironeaba de mi, molesta y avergonzada por tal proximidad, cosa que me tenía sin cuidado, ya que desde pequeña mostré tendencia a todo lo estrafalario heredado de algunas mujeres de mi sangre.

Isidra se fue un día, para consternación de muchas. Sin mediar explicaciones, dejando a su marido-maquinista, desconsolado en la casita al borde de la vía. No tuvo él, más a quien saludar con sus nubes de vapor, y lo peor, sin saber a ciencia cierta, porqué aquella ingrata había despreciado su ruidoso amor.
Se fué. quizás, cansada de tanto escándalo de hierros y nubes sucias. Dicen que iba vestida con uno de aquellos modelos de los que flotaban entredoses y puntillas, una piel de Marta Cibelina al cuello y llevando en sus brazos el gato dormido y la caja de música.
La seguía, cargando a cuestas su equipaje como un simple changador, un viajante que hasta entonces la surtía de avíos y, que quizás, con su ocupación silenciosa de objetos mínúsculos, despertó en ella un ansia desenfrenada de ser amada suavemente, lejos de la vía del tren.

Lo has leído. Si estás en la práctica Floral, te propongo que me digas:
¿Qué florales le darías tu, a Isidra?
Un abrazo
Graciela

Abrir mi propia ventana al Mundo

Ser Terapeuta Floral ha representado una nueva vida. Cuando este Universo totalmente desconocido tomó cuenta de mi, estaba en un impasse. De vuelta de muchas cosas y lo que es peor, sin conocerme mucho. Hizo que una parte, se separara de mi esencia y comenzara a comprender el ser humano como un Todo. Sin aplaudir ni juzgar. Escuchando, observando, aceptando aunque muchas veces me aturdiera. Y por último, comprender las causas y como podria ayudar a resolver el dolor, la angustia, el temor.

Lo primero que debí hacer fue comenzar por mi misma. El proceso de un Terapeuta Floral no es entender y seguir las directivas del Dr. Bach. Es aceptar que si llegué a abrazar su misma causa olvidándome de mi misma, fue porque ya estaba pronta. Mi alma clamaba por este sendero en el cual podría ayudar y ser ayudada.

Es un recorrido para reconocer la fortaleza que aunque siempre estuvo en mi interior, por desconocerla se mantenía silenciosa. Es  descubrir que los otros que de a poco van llegando, están carentes, heridos, como yo misma en otros tiempos. Recordar que cada dolor de nuestro cuerpo se relaciona con conflictos provenientes del alma. Y de a poco ir reconociendo que la paz está muy dentro de cada uno. Y que una vez lograda una armonía cada vez más constante toma cuenta de cada día.

El simple hecho de ser consciente de lo que nos ocurre y reconocer nuestras limitaciones es el principio de la victoria.
Ser Terapeuta Floral es como tener tu propia ventana al mundo y abrirla de par en par. Pero no para admirar el paisaje y respirar los aromas de cada día, es también para tender una mano amiga a quien pueda estar viviendo algo parecido a tu pasado.
Es un camino hacia la humildad bien practicada y reconocida. Un mundo que te ayuda a crecer como persona, descubriendo tu sabiduría interna que siempre estuvo esperando que la dejaras expresarse. El mismo hecho de estudiar cada esencia de todos los sistemas florales que te atraigan te hace reflexionar sobre todas las cosas que la naturaleza estaba esperando para ofrecerte.
Recuerda: nada es casual, todo tiene un porqué. Este mundo al cual pertenezco es lleno de gratificaciones.
Te invito a conocerlo, participa. Abre tus caminos por este sendero.
Un floral porque quizás en este momento debas elegir un camino.
Wild Oat
Un abrazo
Graciela

Un día en Carmel

No imites por favor. Sé tu mismo.

Por esas coincidencias de la vida, estoy aquí y te puedo decir: sé tu mismo. Tiempo atrás cuando mi búsqueda incesante por conocerme me llevó a apartarme de todo lo dictado por cánones de mi generación y principios de familia, paso a paso pude descubrir verdades maravillosas. Casi mágicas, porque surgieron de la nada en mi interior. Una frase escuchada al pasar, otra leída en algún librito quizás de un autor poco conocido pero que anidaron en mi como verdaderos tesoros. Y se fue armando mi nuevo perfil.

No te importes a ciegas con lo dicho por aquellos que haciendo parte de tu vida te quieran influenciar. Óyelos y sopesa lo escuchado. Luego, reserva lo que tu corazón acepte y el resto déjalo ir. Porque no debes olvidar que cada uno de nosotros es Único e Irrepetible. Entonces no creas en todo lo que te quieren enseñar. Diseña tu propio modelo de vida.

De pequeña muchas veces oía: -tú, cállate que los niños no saben nada...¿Qué crees que me pasaba muchas veces luego de mayor? Que aquella frase que había calado hondo mi interior, me tenía convencida que yo era una nulidad.
Pasado el tiempo con mucho silencio y rebeldía, fui reconociendo que si seguía el sendero indicado por los otros mi alma se sentía incómoda junto a la mente y cuerpo que habitaba. Fui sumando experiencias y probando que por ejemplo: si dejaba de ir a misa, nada terrible me sucedía...
Y mis actos de coraje fueron sumando dos oponentes: adquirí seguridad en cada paso, munida de mucha valentía y certeza. Y en el bando contrario me fui ganando la fama de "cabeza hueca", díscola, irreverente...

Cada uno tiene su tiempo, su ritmo, para llegar a la cima de su propia montaña. Vencer todos los días algún obstáculo y a los pocos convencerte que no es la "mala suerte" que te acecha, sino tu alma que te pone lecciones porque ya estás pronto para triunfar. Y no olvides de agradecer por cada nueva victoria. Sobre los otros, sobre el diario vivir, sobre tu sombra.
Honrarás de esta forma la divinidad que habita en ti.

Mi creencia, la certeza de mis pasos, son el resultado de mi Búsqueda. Nacida de mi deseo irresistible de encontrarme, conocerme, de dejar hablar alto a mi Yo Superior, que palpita agradecido por que he aprendido a escucharlo.

Y como ya he contado anteriormente, aquí te dejo un floral que puede ayudarte a que sigas "contra viento y marea" lo que tu corazón amorosamente te indica. Usarlo es tu opción.

Walnut + Larch.-

Un abrazo.

Graciela

Estoy agradecida a mi soledad

Quizás te parezca extraño esa declaración inicial, pero es una confesión venida del corazón.
Si, agradezco a mi naturaleza esta elección hecha en compañía nada más que del tiempo.

En la medida que mi destino se iba dibujando, inspirado en el uso del libre albedrío, un perfil definido de mi otro yo, fue tomando forma. Claro que tuve épocas de una búsqueda constante de compañia. De amigos, protectores, familiares, amores...pero con el devenir de los años, me fui sintiendo bien, acompañada nada más que por mi misma.

Descubriendo a los pocos que esta soledad tiene como bendición máxima el poder entablar diálogos con mi otro yo en cualquier momento del día. Para descubrirme, discutir y llegar a tener por veces, mucha rabia  por actitudes equivocadas, por exceso de ingenuidad. En otro momentos llegar a vislumbrar perfiles de egoísmo, de rencor alimentado. Y luego, no mucho más tarde, bendecirme y hacer las paces. Por sentir que tengo derecho a darme una tregua, a curvarme frente al desacuerdo. De esta forma aprendo a tener más paciencia con el prójimo y lo acepto aunque no lo entienda. Tengo tiempo para luego de estar en su compañía reflexionar qué significó cada palabra, acción o gesto venido de su lado.

Pude entender ayer, por ejemplo, que la religión de mi amiga María, no tiene ningún nombre, su religión es la familia como para mi es la búsqueda incesante.
Buscar, siempre me hace amar mejor a los míos, perdonarme cuando en otros tiempos me castigaba tanto por pequeños errores. Mi búsqueda, es la meta diaria transformada más tarde en paz en el centro de mi ser. Es el eureka! al descubrirme de tantas otras maneras...

No es verdad que hayamos nacido para ser la mitad de alguien. En mi caso soy la mitad de Algo.
Hubo un largo camino a desbravar y, en el que esta soledad consciente me ayudó a no apartarme de la senda. ¡Hubo tantos otros tiempos que luchaba sin saber  cual era el motivo que despertaba mi rebeldía!. Y por épocas, vencida y corriendo en círculos tratando de escapar de mi ignorancia me dedicaba frenéticamente a los libros de auto-ayuda...
¡Craso error!...Cada volúmen que terminaba, me dejaba más vacía que antes...y un pensamiento cínico, como un mantra retumbaba en mi mente: -este conglomerado de ideas, solo es de gran ayuda para el bolsillo del autor...

Más tarde, mucho más tarde, descubrí que en mi caso en particular, la ayuda necesaria aguardaba ser descubierta en mi interior. Allí estaba depositado un manantial infinito de conocimientos a los que podría acceder para encontrarme, para estar de vuelta de muchas vidas, para quererme mejor, para hacer las paces con viejos silencios mantenidos por temor...

Pero, primero debía llegar a practicar una regla de oro: el silencio. Saber también el valor de cada pensamiento y cada palabra lanzada. Aprender a escucharme. Y a cada paso dado maravillada podía ver como los embates de la vida ya no me aterrorizaban. Cuando algún fantasma se insinúa, me vuelvo un foco de luz hacia mi interior: medito, oro, entono mis mantras y...mi corazón no pierde su ritmo. Me siento inundada por una armonía indescriptible...

Te he contado ésto, para que si eres uno como yo, no te sientas solo. Ve si al leer esta nota estás de acuerdo con algunas palabras. Si tu interior todavía te susurra el deseo de encontrar a alguien, y si has aprendido a escuchar tu corazón entonces, no dudes que así será...Es cuestión de tiempo...

Por si acaso, aquí te dejo un floral para desvendar tu caso.

Agrimony + Mimulus.-

Un abrazo.

Graciela

La Unidad y la Salud

¿Qué inquietudes te asombran? ¿Sabes a lo que me refiero cuando digo: "la unidad y la salud"?
Quizás estés buscando información o, ampliar tu conocimiento. O estás aquí nada más que para matar el tiempo y te das cuenta mientras vas leyendo que mis líneas parecen escritas para ti. Las inquietudes que te limitan, aquellos conflictos no resueltos, o un viejo síntoma del que no has conseguido librarte aunque mucho lo has intentado en el área de la medicina tradicional.

Déjame introducirte en el concepto del título. Terapeutas Florales defendemos la idea-base, de que si cuidas tu armonía interior, te aceptas como eres y al mismo tiempo luchas para superarte, te perdonas y te tienes paciencia, no tienes porqué enfermar. Si el Ser Superior que habita en ti te inspira a practicar esos enunciados básicos, vivirás en Unidad con el Todo que te circunda.

Si reflexionas verás que no prestaste atención a una serie de "avisos" que recibías antes de que el cuadro que te aflige se instalara. Síntomas poco perceptibles: cambios en tu estado de humor, una tristeza que va y viene, dolores de cabeza que te quitan el ánimo.
Puede ser el recuerdo de un duelo que todavía te ensombrece, un rencor que no te da tregua, un agotamiento que te perjudica y compromete tu desempeño laboral.
En fin, tantas formas de no fluir en la vida y sentirse temeroso, infeliz...
Te has alejado de la Unidad y vas perdiendo la salud.
Busca ayuda. Los que trabajamos con las áreas de Medicina Complementaria -Florales, Reiki, Acupuntura, etc- el objetivo principal es saber escuchar. El hombre hoy en día, tragado por la vorágine de su tiempo, muchas veces se siente frágil, y asustado de la soledad que lo rodea en el medio de tanta gente. Luego el terapeuta que elija tratará de aliviar la congoja acumulada con las armas que cada uno de nosotros aprendió a usar.
Desahógate. Vacía tu alma. Al hablar y escucharte sentirás un alivio creciente.
Y si te parece una opción aquí me tienes.
Mientras tanto te dejo un floral. Un armonizador.
Rescue Remedy.-
Un abrazo
Graciela

un nuevo día

Puede ser, que mientras descubres esta nota, no estés teniendo un buen día. Sin motivo aparente, han surgido de la nada algunos fantasmas para atormentarte. Te sientes frágil, fragmentado, perdido...Esto viene sucediendo con cierta frecuencia y no sabes qué medidas tomar.

MEDITA - No te retraigas pensando que te hago perder el tiempo, que contigo no tienen nada que ver las prácticas espirituales. Antes de cortar el vínculo con mi nota, date un paseo por internet. Y verás que esta práctica milenar ha llegado de Oriente para modificar nuestra mente occidental. La hemos ido probando de diferentes formas, adaptándola a nuestra manera de ser y ¡oh milagro! hemos visto sus virtudes. Verás en internet como grandes empresas han creado jardines, salones, propicios para dicha práctica de sus empleados. Corretores de bolsa, empresarios y otros tantos han descubierto que en el medio de la barahúnda diaria, retraerse durante 1/2 hora refresca la mente, aclara las ideas aumentando la creatividad y más tarde trae una infinita gama de beneficios a la salud.

Pesquisa, pregunta, entra en contacto conmigo o con quien conozcas que te pueda decir algo más sobre esta sutil y enriquecedora práctica y luego nos cuentas como te va.

Debes tener la constancia de practicarla todos los días. Quizás ni bien te levantas, antes de desayunar, de lavarte la cara, de salir a realizar tu caminata matinal, nunca deberás practicarla luego de comer. La mente no puede ocuparse de intentar vaciarse y al mismo tiempo llevar adelante una digestión.

Busca un lugar que te atraiga en tu casa, siéntate confortable en el suelo o en una butaca que te permita mantener una postura relajada y erecta al mismo tiempo. Cierra los ojos y recorre mentalmente tu cuerpo, deténte donde encuentres un punto de rigidez: aflójate. Relájate. Coloca tus manos sobre el regazo con las palmas hacia arriba...y concéntrate en la respiración que se va aquietando y volviéndose cada vez más imperceptible. Y ya no te muevas más.

Ve, de a poco. Al principio quizás te cueste estarte quieto. Para comenzar unos 10' ya estaría bien. Pero a los pocos irás alargando el tiempo y te puedo asegurar que le tomarás gusto. Más allá de tu comprensión lineal irás disfrutando ese momento de silencio consciente. La mente que tiene sus argucias, irá saltando de un tema a otro. No le resistas. Déjala que así lo haga. Una y otra vez, tu vuelve la atención a tu respiración: inspiras...expiras...

Un buen día, maravillado podrás contar: que tu sueño de cada noche es profundo y reparador, que dolores que te caminaban de vez en cuando por el cuerpo han desaparecido, que tu humor es estable...en fin! que estás de vuelta, de bien con la vida...
 Dejo en cada una de mis notas indicación de una combinación floral acorde al tema que acabo de exponer...quien lo quiera puede hacer uso de ella.

Clematis + White Chestnut + Elm + Crab Apple

Un abrazo.
Graciela